viernes, junio 30, 2006

"Seminario ha roto el marco de referencia marxista para hablar de sociología desde una perspectiva distinta, una en la que todos podemos ser parte, como audiencia.

En el Ecuador pareciera que sólo era posible analizar la política o la economía desde el punto de vista de la lucha de clases y nada más.

Seminario ha demostrado que es posible enfocar la mediología hacia el estudio de los contenidos sociales, cualquier que estos sean.

Después de todo, cualquier cosa de la que se hable es como la letra de una canción que nunca terminamos de aprenderla o que no tenemos tiempo de memorizar al pie de la letra, pero cuya melodía se pega en nuestra memoria y nos acompaña... como un nuevo envase dentro del cual caben nuevos temas, nuevos enfoques, nuevas salidas del marco vigente.

Saludo la rotura, con buen ritmo, tempo e intervalos, del paradigma marxista que monopoliza y aplasta todo estudio de la sociedad dentro del Ecuador y gracias al cual seguimos dando vueltas sin ir a ningún lado."

Paul T. Goya, co - autor, The Ole Degree
LSK: Empecemos por lo que debiera ser el final del cuestionario, pero, igual, ¿como va el proyecto del nuevo libro?

AS: ya me senté sobre el sofá...

LSK: ¿Encendió la laptop, empezó a escribir, ya tiene el tema?

AS: sentado, sobre el sofá, empezaré a teclear...

LSK: ¿cómo van las ventas del primer libro? ¿cómo ha asido la acogida del público?

AS: Esto sebiéramos preguntarle a mi editor, Quimera.

LSK: ...hablemos de La Sociedad Karaoke. ¿Por qué tanto énfasis en la prensa de televisión?

AS: El 80% de las motivaciones humanas son visuales; los hombres y mujeres somos animales muy visuales; y el medio –por antonomasia- que brinda imágenes en movimiento, más audio, más distracción… es la televisión.

Además, la función principal del sistema visual es percibir objetos y eventos del mundo que nos rodea; ergo, la realidad que conocemos la construimos a partir de lo que vemos. Lo que vemos y más (pues el cerebro necesita más información que la vista para construir una interpretación del mundo visual). No tenemos, en el cerebro, un área visual… tenemos varias. De hecho, según V.S. Ramachandran son 30 ubicadas en la parte posterior del cerebro
. Anatómicamente, los estímulos oculares toman dos sendas, una al cortex –pensamiento- y otra evolutiva que ordena las cosas espacialmente. Entonces, la realidad que conocemos la construimos a partir de lo que vemos y sentimos.

LSK: Pero la prensa escrita, ¿no es también visual?

AS: La prensa es visual, si que lo es. Incluso visual y táctil. Pero el poder de influencia no es tan masivo. La tele manda.

Ni siquiera argumento la respuesta comparando la cantidad de personas que leen el diario (ene veces menor) a la cantidad de personas que ven la tele.

Por ejemplo, la imagen de Eduardo Maruri como presidente de la CCG es que está enfocado en su gremio y que no da declaraciones… esto es una verdad a medias. Si está enfocado en su gremio y si da declaraciones, sobretodo en prensa. No sale en TV. Por ello la percepción, equivocada, que no sale en medios. La tele manda.

LSK: El texto usa muchos anglicismos, extranjerismos, latinismos...¿Por qué el uso de tantas palabras en inglés?

AS: (riéndo) me previno el editor que debía explicarlo. Es simple, así como los abogados hablan en “abogadés”; los marketers y comunicadores tenemos nuestra propia jerga… y ésta usa muchos anglicismos.

Por otra parte, como decía una amiga, a veces debes usar el inglés porque la expresión tiene más fuerza así. Por ejemplo: no es lo mismo “apagado” que “off”; no es lo mismo “estás fuera de onda” que “estás out”.

LSK: Ha tenido poca prensa televisa cubirnedo el lanzamiento, ¿será porque la obra critica a la prensa?

AS: (riendo, casi a carcajas) No critico a la prensa. Critico a la sociedad. Si los periodistas se sienten criticados es que no han leído todo el libro, sino que se dejaron llevar por las argumentaciones comerciales que usamos para vender el libro (más risas)... o sólo leyeron el prólogo o la contratapa. La prensa no es más que el reflejo de la sociedad dónde ella reporta sus noticias.

LSK: …pero la prensa, ¿inventa?

AS: Las leyendas urbanas –resultado histórico de un rumor- no son mentiras, no son inventos. Son verdades supuestas.

Por otra parte, en el plano de la comunicación política –por ejemplo-, el periodismo por televisión no sólo reseña los acontecimientos sino que los crea.

LSK: Volvamos a la televisión, ¿cree que tiene tanto poder realmente?

AS: Estoy convencido que es así. Popper, un filósofo, decía que la TV se ha convertido en un poder colosal; “como si hubiese reemplazado a la voz de Dios (…)”, dijo.

LSK: Entonces los medios, ¿son el cuarto poder de un Estado?

AS: No, los medios son el primero.

LSK: ¿Si la prensa de televisión tiene tanto poder e influencia, por qué los periodistas candidatos en las últimas elecciones seccionales del Ecuador no obtuvieron tan buenos resultados?

AS: Porque una cosa es ser presentador de televisión, creíble, líder de opinión; y otra –muy distinta- es ser candidato a funcionario político, increíble, seguidor de caudillos. Una cosa es ser periodista y otra ser parodista.

LSK: Esta influencia de los medios en la vida política, y particularmente de la televisión, ¿desde cuándo se da?

AS: Creo que pasamos de los mítines y balcones y dedos a la vídeopolítica en 1984 con la campaña de León Febres Cordero a la presidencia.

Rescato tres momentos claves en esa campaña: primero la imagen de Oswalo Hutado –presidente- con un anzuelo en la boca y la frase “por la boca muere el pez”; segundo el “pan, techo y empleo” y el jingle que llamaba a tomar la decisión para poder rescatar al Ecuador; y tercero el “míreme a los ojos, señor Borja” del debate que le daría a León la imagen de Presidente.

De allí, en más, la campaña de “El Presidente” de Rodrigo Borja; o “El Loco” de Abdalá Bucaram son íconos vídeopolíticos… que no existirían sin la TV (que oxymorón).

LSK: Pero la televisión no le sirvió al Presidente Gutiérrez. Esos días finales invirtió en publicidad cerca del millón de dólares… ¿qué pasó?

AS: La gente absorbe más fácilmente la información negativa que la positiva. La clave está en la pre-existencia de una imagen ya conformada en el receptor que hace, o no, creíble el mensaje televisivo.

Además, ni la mejor publicidad salva a un mal producto.

Así, cambiamos de presidente como cambiamos de detergente. Porque en el fondo, ambos –presidente y detergente- ofrecen beneficios estrictamente emocionales (y como tales, subjetivos). Limpiar más blanco o refundar la república son propuestas subjetivas.

Amén la República.

SEMINARIO EN LA FERIA DEL LIBRO EXPOLIBRO

Andrés Seminario, autor de la obra La Sociedad Karaoke, estará presente en la La Feria Internacional del Libro en Guayaquil denominada también como EXPOLIBRO 2006 con una ponencia sobre la comercialización y el mercadeo de libros y librerías en el país.

Al ser interrogado sobre su participación, Seminario comentó que "
es difícil vender un libro en el país; pero es más difícil cuando los autores, casa editoriales y librerías no entienden que un libro compite en la categoría entretenimiento con los cines y el fútbol.


Como autor de La Sociedad Karaoke entiendo lo complejo que es captar la atención de los posibles lectores para que inviertan $ 12.50 por un texto
..."

miércoles, junio 21, 2006

Otra noche de copas. El bar está a full. "Hola soledad, no me extraña tu presencia...", Alci Acosta te da la bienvenida. Tampoco te sabes esta la canción, pero la has oído. La has oído... como no, es un clásico.

"Hola soledad, esta noche te esperaba, aunque no te diga nada, es tan grande mi tirsteza, ya conoces mi dolor..." las letras están proyectadas en los televisores de siempre.

Todos cantan, "...este encuentro es uno más..." y cantas.

¿Dónde has oído ese coro? ¿Quién escogió la canción? No importa quien la escogio porque todos, incluso tu, cantan. En 1838 un escritor estadounidense, James Fenimore Cooper, publicó The American Democrat. En ese texto sostuvo que “es un defecto común de las democracias el que la opinión pública sustituya a la ley. Esta es la forma usual en la que las masas de gente exhiben su tiranía.”

Tiranía o democracia, yo prefiero imaginar una epidemia.

Una epidemia como la del bostezo... o la de los desconocidos que te acompañan en el bar karaoke. Nada es tan contagioso. Un bostezo, una risa, una canción en un bar karaoke... una emoción. Nada tan contagioso como una emoción. Es más, el bostezo es emocionalmente contagioso. De hecho, estoy seguro que algunos lectores, con sólo leer la palabra "bostezo"…bostezaron. Para algunos antropólogos, bostezar es una forma de comunicación inteligible.

Por cierto, también bostezan los perros y los gatos. Ratas, ratones y conejos bostezan. Incluso reptiles y monos. Un dato curioso adicional, los machos (incluido los hombres) bostezan más que las hembras… y si, el sexo tiene que ver pues estudios confirman que se debe a la acción de la testosterona y que el bostezar guarda estrecha correlación con periodos de excitación sexual (pero eso es otra historia).

Más allá de esto, lo importante es que desde el punto de vista psíquico y funcional, el bostezo -en el humano- es el mejor ejemplo de un acto motor estereotipado y contagioso. Emocionalmente contagioso. Como animales gregarios, que somos, estamos/somos sujeto de las pasiones del grupo en su violencia y en su pánico… o aburrimiento, hastío, o fatiga.

Es más, los cues no verbales son más importantes que los verbales. Los movimientos físicos básicos tienen un efecto intenso y complejo en nuestros pensamientos y sentimientos.

Pues bien, es innegable la función social del bostezo. Y es innegable que –entre ustedes- unos bostezaron al leer la palabra la primera vez, otros bostezaron al ver a quienes bostezaron y otros lo hicieron con efecto retardado. Guardando las distancias, es lo que los sociólogos llaman el Modelo de Difusión. ¿Conoces el Modelo de Difusión?

Es el que sostiene que hay varias instancias en las que una idea comercial o una innovación es aprehendida por una población. Están los innovadores (que se aventuran a probar), los early adopters (líderes de opinión), la mayoría temprana, la mayoría tardía (ambos nunca probaría nada hasta que los líderes lo hayan probado y comentado)y los laggards (el grupo más tradicional, que no ve una necesidad de cambio).

Así como el bostezo… las ideas y las marcas y los mensajes y las conductas se desarrollan como los virus (esta es la primera conclusión del libro La Sociedad Karaoke). De innovadores a early adopters a las mayorías. La otra conclusión es que las ideas y las marcas y los mensajes y las conductas se contagian por la influencia de nuestro entorno, del contexto inmediato y de las personalidades que nos rodean.

Un poco como un rumor. Que un rumor es una epidemia de ideas y mal-conceptos que terminan predisponiendo una actitud hacia alguien o algo. Máxime cuando los filtramos a través de nuestras experiencias, conocimientos o sentimientos.

Cuando cantamos por segunda vez la misma estrofa de una canción nos sale mejor. Ya conocemos la melodía, dónde van las inflexiones de voz, dónde enfatizar el sentimiento. Ya hemos visto como se comportan los demás cantantes del bar karaoke. Ya sabemos, entonces, que se espera de nosotros... "...y con temblorosa y recortada, escucha triste hermano esta horrible confesión..."

En un bar karaoke asimilamos las conductas, poses, y cánticos o salimos porque nos sentimos out. "...al verla con su amante, a los dos, los maté, por culpa de ese infame... moriré..." Y esta asimilación a una conducta colectiva es generalizada… por ejemplo, un padre de familia, clase media, conservador, flemático, va al estadio el domingo y se transforma en un rudo y gritón fan.

En un karaoke se espera que cantemos. Más fuerte, más alto, con más feeling. "...al verla con su amante, a los dos, los maté, por culpa de ese infame... moriré..." Y para hacer oír nuestra voz, personalizamos un poco el canto. Pero sólo un poco. Somos parte del “nosotros”.

Sales del bar con el coro en la cabeza... "aturdido y abrumado..."

Duermes unas horas. 6h55 suena el despertador., otra vez. Es jueves. Enciendes la TV. El mismo entrevistador pregunta y responde, él mismo, al entrevistado. No te sabes el contenido del tema, pero lo has oído. Conoces como va el coro y cantas. Cantas en la ducha "...no te apures compañero, si me destrozo la boca, no te apures que es que quiero, con el filo de esta copa, borrar la huella de un beso traicionero que me dio..."

No lo sabes. Pero eres un protagonista de La Sociedad Karaoke. Sales al trabajo y llevas claro el coro... "no al TLC, fuera la Oxy, sírveme que me destroza esta fiebre de obsesión...". Cantas camino a la oficina, "no al TLC, fuera la Oxy... quiero sangrar, gota a gota, el veneno de su amor..." No importa si desconoces el contenido del resto.

Cantas. No piensas en la letra, cantas.

"...moooozo, sirveme en la copa rota, sírveme que me destroza esta fiebre de obsesión..."

Sólo cantas.

martes, junio 13, 2006

Entras al bar. No te sabes la canción, pero la has oído. "...no tocar, peligro de muerte..." las letras están proyectadas en lo monitores. Conoces como va el ritmo, todos cantan, "...me hacen ir más allá..." y cantas.

¿Dónde has oído ese coro? ¿De Amistades Peligrosas? "..me quemas con la punta de tus dedos, tus manos hacen llagas en mi piel, me abrazo con tu lengua que es de fuego..." regresas a casa.

Duermes unas horas. 6h55 suena el despertador. Enciendes la TV. Un entrevistador pregunta y responde a su entrevistado. No te sabes el contenido del tema, pero lo has oído. Conoces como va el coro y cantas. Cantas el coro "...me abrazo con tu lengua que es de fuego, la sangre hierve, ¿o no lo ves?..."

Un día nuevo como protagonista de La Sociedad Karaoke. Sales al trabajo y llevas claro el coro... "no al TLC, fuera la Oxy...". Cantas camino a la oficina, "no al TLC, fuera la Oxy... na, na, na, na na..." No importa si desconoces el contenido del resto. Conoces el coro y, a fuerza de repetición, construyes una verdad axiomática que luego vas a justificar por otros argumentos televisivos.

Unos Presuntos Implicados te dicen "...como hemos cambiado, que lejos ha quedado..."

Digamos que el tema pasa por los genes. Y no por la cantidad de genes que tenemos, pues un parásito -por ejemplo- tiene sólo un tercio menos genes que nosotros. Evolutivamente hablando, estamos muy cerca de los chimpancés, de los ratones y del jején que jode en la playa.

Claro que los humanos hemos evolucionado nuestra respuesta cognitiva (racional) más que las otros especies. Pues el asunto no es cuántos genes tenemos, sino cuál es la función de cada uno de esos genes.

En los años 90, la Década del Cerebro, los neurocientíficos demostraron que nuestras mentes eran producto de nuestros cerebros. Y que “la estructura inicial de la mente, como la estructura inicial del resto del cuerpo, es producto de nuestros genes" como dice Gary Marcus en The Birth of the Mind: How a Tiny Number of Genes Creates the Complexities of Human Thought.

Ahora bien, cada gen tiene dos partes; una mitad que construye una proteína y otra que regula su función. En palabras del mismo Marcus, “es esencialmente como un ‘si’ en un programa de computadora. Cada gen, realmente es como una declaración ‘si/entonces’. Hay un ‘entonces’ que dice ‘construye esta proteína en particular’. Puede ser insulina en el páncreas, hemoglobina en los precursores de los glóbulos rojos, o puede ser una proteína específica para una neurona del cerebro”.

Existe un gen que influye en la conducta violenta de alguna manera. Estudios han demostrado que quienes poseen ese gen son más proclives a ser violentos que aquellas personas que no lo poseen. Es más, al parecer habría algún tipo de predisposición que depende del entorno. Si alguien crece en un ambiente familiar hostil y tiene este gen determinado, entonces tenderá a ser violento. Si ese alguien crece en un ambiente familiar amoroso y tiene este gen determinado, entonces no tenderá a ser violento.

El gen produce es una adaptación del temperamento del individuo, como un switch.

Si el entorno es violento, swith on, entonces el sujeto tiende a ser violento. Pero no por la violencia per se; más bien como una manera de sobrellevar el entorno violento.

Si el entorno creado por los Medios está orientado a la política, swith on, entonces ¿estamos predispuestos a orientar la rutina hacia la política?

Si existe cierta predisposición que nos lleva a actuar de una u otra manera determinada en respuesta adaptativa al entorno, como individuos y como grupos, entonces ¿al cambiar el entorno cambia nuestra respuesta conductual?

Si todos cantan en el bar karaoke, switch on, entonces ¿debo empezar a cantar?

Regresas a casa. Duermes unas horas. 6h55 suena el despertador. Enciendes la TV. El mismo entrevistador pregunta y responde a su entrevistado. No te sabes el contenido de la entrevista, pero -realmente- no importa. Conoces como va la melodía, ya repites el coro y cantas... viendo la tele...

"...me haces tanto bien, me haces tanto bien..."


Es otro día nuevo como protagonista de La Sociedad Karaoke.

martes, junio 06, 2006

TRACKS DE LA SOCIEDAD KARAOKE
TOP FIVE LIST
  1. Fuera Oxy!
  2. No al TLC!
  3. Que se vayan!
  4. Que se vayan todos!
  5. La empresa privada es eficiente; la empresa pública es corrupta.
OLD TIME HITS

  • Sí se puede (gracias a la Selección de Fútbol)
  • Nadie se me baja de la camioneta (Abdalá Bucaram)
  • Míreme a los ojos, señor Borja (León Febres-Cordero)
  • Ni un paso atrás (Sixto Durán Ballén)
  • Un sólo toque (Abdalá Bucaram)
  • Palo porque bogas... (Jaime Roldos)
  • El petróleo es de todos los ecuatorianos
  • Recadero de la oligarquía (Assad Bucaram)

lunes, junio 05, 2006

Que sorpresa que la Iglesia tenga más admiradores (91%) en Guayaquil que en Quito.

Que sorpresa que las Cámaras son mejor percibidas en Quito (72%) que en Guayaquil (62%).

Que curioso que en el top 5 de Guayaquil, los militares estén quintos (67%).

Que poco curioso que los medios sean top 3 en Guayaquil (69%) y top 4 en Quito (68%).

Dan Brown, por ejemplo, le ha hecho un gran favor a la Iglesia Católica. Los devolvió a la posición de "buenos muchachos" frente al pasado de rumores, acusaciones y críticas. Y claro, la iglesia le hizo el favor a Brown.

Que karma!

¿Denominador común? Comunicación...

switch on


La promesa de la felicidad en el individuo, la familia, la escuela, la fe, la empresa o el Estado, se encarna ahora en la comunicación.

Desde el Vaticano, La Iglesia usó la comunicación para criticar El Código (cualidad) pero sólo logró vender más libros (d-efecto).

Desde la óptica de Brown, él escribió un libro que vendió hasta la versión fílmica (virtud) pero su éxito se lo debe a los demás (vicio).

¿Podemos decir que hoy, el mundo, es más libre y más democrático? Podemos.

¿Podemos decir que hoy, el mundo, hay más censores y más manipuladores? Podemos.

Está claro que las ofertas de la felicidad del individuo o de la familia, en la fe o el espíritu, en la empresa o el Estado, se concentran en la comunicación.

switch off

viernes, junio 02, 2006

El hombre busca un mundo en el cual sea posible distinguir con claridad el bien del mal porque en él existe el deseo, atávico e indomable, de juzgar antes de comprender.

Es cuestión de chicos malos o chicos buenos. La gente, nosotros, tendemos a poner las cosas en blanco y negro.

Determinamos buenos y malos.

Como me diría un reconocido sociólogo y asesor político ecuatoriano, “Andrés, la gente tiende a caricaturizar...".

Prima facie: hablamos de percepción.

Pues bien, 1x1 MARKETING DIRECTO hizo un estudio para determinar chicos buenos/malos en Guayaquil y Quito. Los resultados son los siguientes...

En Guayaquil son buena gente la Iglesia para un 91% de los encuestados; los empresarios lo son para el 70%; los Medios - Prensa para el 69% y aparte expresaron afecto por la TV un 69% de los encuestados.

Además son calificados como buena gente:

Militares: 67%
Cámaras de Producción: 62%
Ciudadanos/Ecuatorianos: 60%
Indígenas: 49%
Estados Unidos: 40%
Policía: 39%
Gobierno: 17%
Partidos Políticos: 11%

No me sorprende que los políticos sean calificados de "buena gente" sólo por el 6% de los encuestados.

En Quito son buena gente las Cámaras de la Producción antes que la Iglesia. Las Cámaras de Producción son buena gente para un 72% de los encuestados; la Iglesia lo es para el 71%; los Ciudadanos para el 71% y para el un 68% de los encuestados son los Medios - Prensa (aunque no la TV que sólo obtiene un 65%).

Además son calificados como buena gente:

Empresarios: 65%
Indígenas: 57%
Policía: 51%
Militares: 48%
Estados Unidos: 33%
Gobierno: 12%

Como en Guayaquil, en Quito los políticos son calificados de "buena gente" sólo por el 7% de los encuestados.